Una de las características de la economía actual es la proliferación de encuestas, observatorios, estudios e informes, hasta el punto que los más fiables son aquellos que sacan una media ponderada de los datos, en muchas ocasiones dispares, que ofrecen dichos estudios sobre la marcha de la economía, la confianza del consumidor y un largo etcétera de temas. La mayoría de estos trabajos afianzan los argumentos de los políticos y economistas institucionalizados. Permítame decirle que no creo que estos datos dado que he podido comprobar que en la mayor parte de las ocasiones son erróneos. Leer más